Vivimos juntos la Cuaresma, viajando hacia nuestro propio corazón en la Catequesis, cercanos a Jesús y su Palabra.

Se desarrollarán aquí tres encuentros de Catequesis bajo una misma temática para trabajar durante las semanas de Cuaresma.

Primer encuentro

Objetivos:

  • Bajo la dinámica de un viaje, vamos a proponer a los alumnos conocer qué es el tiempo de Cuaresma, invitándolos a transitarlo para llegar juntos al corazón de Jesús.
  • Dejarnos maravillar e interpelar por la Palabra de Dios, descubriendo cómo Jesús nos muestra el camino para vivir alegres con él.

Inicio:

Vamos a iniciar un viaje, pero un viaje a nuestro propio corazón, ya que tenemos un destino, el destino es el corazón de Jesús porque dentro de algunos días vamos a vivir juntos la fiesta de la Pascua, que es la fiesta más importante para los amigos de Jesús, ya que Jesús va a dar su vida por nosotros y nos va a salvar del pecado.

Desarrollo: Se presentará un tren ¿Conocen los trenes, vieron alguno? ¿cómo están formados? ¿Qué llevan en sus vagones, alguien sabe?

Vamos a ir armando encuentro tras encuentro nuestro tren. Si tuviéramos que elegir a alguien para que sea la máquina, alguien que nos guíe, que alumbre nuestro camino, que nos avise cuando hay algo en el camino por lo cual hay que detenerse. ¿Quién sería?

Vamos a pensar juntos.

¡Jesús va a ser nuestra máquina!

¿Y los vagones? ¿Qué podrán traer los vagones para estar más cerca de Jesús en Pascua?

Iluminación: Vamos a escuchar a Jesús en su Palabra para descubrir con certeza qué nos traen los vagones. Escuchamos Mt 11, 1-5

1 Cuando Jesús terminó de dar estas instrucciones a sus doce discípulos, partió de allí, para enseñar y predicar en las ciudades de la región. 2 Juan el Bautista oyó hablar en la cárcel de las obras de Cristo, y mandó a dos de sus discípulos para preguntarle: 3 «¿Eres tú el que ha de venir o debemos esperar a otro?».

4 Jesús les respondió: «Vayan a contar a Juan lo que ustedes oyen y ven:5 los ciegos ven y los paralíticos caminan; los leprosos son purificados y los sordos oyen; los muertos resucitan y la Buena Noticia es anunciada a los pobres.

Reflexionamos: Jesús nos trae vagones cargados de Buenas Noticias, de su inmenso amor, por eso vamos a dejar la máquina en el salón y en el primer vagón vamos a escribir sus nombres. Luego, cada alumno llevará ese vagón a su corazón diciéndole a Jesús algo lindo. De fondo escucharemos la canción “Pescador de hombres para niños”.

(Los otros vagones los guardamos para los próximos encuentros)

Cierre: Le pedimos a María que se quede cerca en este viaje que emprendimos y le decimos “María Reina”, ruega por nosotros.

Segundo encuentro

Tema: Sumando un vagón más a nuestro viaje.

Inicio: Hoy vamos a agregar un vagón a nuestro tren, un vagón al que nos subimos todos los amigos de Jesús y que trae algo para enseñarnos.

¿Qué nos podrá traer?

Iluminación: Vamos a descubrir lo que trae el vagón escuchando la Palabra de Dios. Mt 6, 5-6

Evangelio según San Mateo

5 Cuando ustedes oren, no hagan como los hipócritas: a ellos les gusta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos. Les aseguro que ellos ya tienen su recompensa. 6 Tú, en cambio, cuando ores, retírate a tu habitación, cierra la puerta y ora a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.

7 Cuando oren, no hablen mucho, como hacen los paganos: ellos creen que por mucho hablar serán escuchados. 8 No hagan como ellos, porque el Padre que está en el cielo sabe bien qué es lo que les hace falta, antes de que se lo pidan.

9 Ustedes oren de esta manera: Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre,

10 que venga tu Reino, que se haga tu voluntad en la tierra como en el cielo.

11 Danos hoy nuestro pan de cada día.

12 Perdona nuestras ofensas, como nosotros perdonamos a los que nos han ofendido.

13 No nos dejes caer en la tentación, sino líbranos del mal.

Palabra de Dios.

¿De qué habla esta lectura? ¿Cuál será el vagón que hoy viene a sumarse a nuestro tren?

¡Es el vagón de la oración!

Jesús nos enseña cómo debemos rezar. Nos dice también que debemos ir a un lugar tranquilo y allí encontrarnos en el silencio con Dios.

(Se dispondrá un espacio distinto con un altar, o se puede ir a la capilla o parroquia, un rincón preparado para el momento, etc)

Por eso vamos a realizar un ejercicio, nos vamos a parar y vamos a acerca despacito a rezar a otro lugar.

Iremos hasta la parroquia en donde ya tendremos dispuesto el altar con la Palabra y un cirio para encender, nos sentaremos en ronda, juntos nos dispondremos a hablar un ratito con Dios, dándole gracias y rezaremos juntos el Padrenuestro.

Cierre: Llevamos nuestras manos al corazón y en silencio le pedimos a Jesús que nos ayude a seguir preparando nuestro corazón para vivir juntos la Pascua.

En el salón se agregará un vagón al tren que comenzamos en el encuentro anterior.

Tercer encuentro

Tema: Domingo de Ramos

Objetivos:

  • Continuar trabajando con la dinámica del tren introduciendo el tema del Domingo de Ramos, desplegando elementos que nos ayuden a comprender los acontecimientos de aquel día.
  • Comprender por qué los cristianos celebramos el Domingo de Ramos.
  • Prepararnos interiormente para celebrar juntos el Domingo de Ramos.

Inicio: Se presentará un nuevo vagón:

En este vagón hay algunos elementos que vinieron de viaje ¡Vamos a descubrirlos!

Se mostrará una ramita de Olivos, un manto, una nota musical y un burrito.

¿Qué son estas cosas?

¿Por qué vienen en el tren que nos ayuda a preparar nuestro corazón?

Iluminación: Para comprender por qué vienen estas cosas en el vagón se leerá la siguiente cita bíblica: Lc 19, 29-38

29 Cuando se acercó a Betfagé y Betania, al pie del monte llamado de los Olivos, envió a dos de sus discípulos, diciéndoles:

30 «Vayan al pueblo que está enfrente y, al entrar, encontrarán un asno atado, que nadie ha montado todavía. Desátenlo y tráiganlo;

31 y si alguien les pregunta: «¿Por qué lo desatan?», respondan: «El Señor lo necesita».

32 Los enviados partieron y encontraron todo como él les había dicho.

33 Cuando desataron el asno, sus dueños les dijeron: «¿Por qué lo desatan?».

34 Y ellos respondieron: «El Señor lo necesita».

35 Luego llevaron el asno adonde estaba Jesús y, poniendo sobre él sus mantos, lo hicieron montar.

36 Mientras él avanzaba, la gente extendía sus mantos sobre el camino.

37 Cuando Jesús se acercaba a la pendiente del monte de los Olivos, todos los discípulos, llenos de alegría, comenzaron a alabar a Dios en alta voz, por todos los milagros que habían visto.

38 Y decían:»¡Bendito sea el Rey que viene en nombre del Señor! ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas!».

Reflexionamos la lectura y a medida que aparecen los elementos nombrados los iremos levantando para que los alumnos puedan identificar las cosas que venían en el vagón.

Vamos a hacer un gesto muy simple, de arrodillarnos cercanos a la Palabra de Dios, y le pediremos a Jesús que él también reine en nuestras vidas, que nos ayude a dejarlo entrar en nuestros corazones y que podamos ser cada día más amigos suyos.

Luego cerrando el encuentro jugaremos unos minutos al gallito ciego poniéndole la cola a un burrito de cartulina pegado en el pizarrón.

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